noviembre 15, 2024

Siete creadores de vacunas COVID-19 ganan el Premio Princesa de Asturias de Investigación

Por el premio contendían cuarenta y ocho candidaturas de diecisiete nacionalidades

Siete de los investigadores que desarrollaron algunas de las vacunas contra la COVID-19 obtuvieron este miércoles 23 de junio el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2021 al que optaban cuarenta y ocho candidaturas de diecisiete nacionalidades.

Los científicos distinguidos son la bióloga húngara Katalin Karikó; el inmunólogo estadounidense Drew Weissman; los doctores alemanes Uğur Şahin y Özlem Türeci; el biólogo canadiense Derrick Rossi; la vacunóloga británica Sarah Gilbert, y el bioquímico estadounidense Philip Felgner.

Su candidatura fue propuesta por el biólogo británico Peter Lawrence, Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2007 junto a su homólogo español Ginés Morata, y contó hoy con el apoyo mayoritario de un jurado que, precisamente, como consecuencia de la pandemia mundial, ha llevado a cabo sus deliberaciones de forma telemática.

Los siete investigadores distinguidos con este galardón han contribuido con sus descubrimientos al desarrollo de tres vacunas basadas en distintas estrategias, pero que tienen como blanco común la proteína “S”, presente en la superficie del virus que facilita su unión y entrada a las células.

Los investigadores galardonados

El bioquímico Philip Felgner ha sido reconocido por ser un pionero en el uso de “microarrays” de proteínas para entender cómo responde el sistema inmunitario a diferentes microorganismos infecciosos y haber desarrollado en 1985 una tecnología utilizada ahora frente a la COVID para la introducción de material genético en un liposoma para que pueda introducirse en las células.

La bióloga húngara Katalin Karikó, considerada la madre de las vacunas basadas en el ARN mensajero (ARNm), ha trabajado en su desarrollo junto al inmunólogo Drew Weissman, tras comprobar que esta molécula provocaba fuertes reacciones inflamatorias porque el sistema inmunitario la detectaba como intrusa.

Ambos introdujeron pequeños cambios en la estructura del ARN para que estas reacciones no tuvieran lugar, un avance que sentó las bases para el uso de terapias de ARN y cuyos resultados sirvieron a Uğur Şahin y Özlem Türeci (BioNTech) y Derrick Rossi (Moderna) para el desarrollo de las vacunas basadas en ARNm que actualmente han sido aprobadas contra la COVID-19.

Su uso, además se puede extender a diferentes áreas de la medicina como el cáncer, las enfermedades autoinmunitarias o la regeneración de tejidos.

Finalmente, la vacunóloga Sarah Gilbert ha sido otra de las personas que han trabajado para conseguir una vacuna (Oxford/AstraZeneca) que está basada en un adenovirus que se utiliza como vector para introducir en las células el ADN que codifica la proteína S, estimulando así la respuesta inmunitaria.

El galardón recayó el pasado año en los cuatro matemáticos cuyas investigaciones dieron soporte a la era digital -los franceses Yves Meyer y Emmanuel Candès, la belga Ingrid Daubechies y el australiano Terence Tao.

Fuente: Noticieros Televisa