noviembre 15, 2024

Pulpo Maya, orgullo de nuestros mares, amenazada por la pesca ilegal.

El sureste mexicano es rico en especies del mar y en la península de Yucatán, tenemos una de las especies endémicas más raras y pedidas a nivel mundial por su alto valor proteínico y sabor en diferentes platillos gastronómicos, nos referimos al pulpo Maya.

Debido a su rareza, el pulpo tiene un enemigo que ha puesto en peligro su reproducción, hablamos de la pesca ilegal, actividad que ha llevado a que la especie, busque nuevos sitios para aparearse, alterando la población de estos moluscos.

De acuerdo con el departamento de Química y Bioquímica en el Instituto tecnológico de Chetumal, esta especie tiene un periodo de vida muy rápido, ya que sólo vive entre un año y año y medio y para ser capturado debe alcanzar una medida de pulpo adulto, tomando en cuenta que pueden llegar a medir hasta un metro.

Ante esta característica, precisamente el riesgo se corre cuando pescadores no verifican su tamaño antes de capturarlo, lo que deja muchas veces las aguas del mar sin ejemplares jóvenes.

A pesar de que la especie no ha sido catalogada en riesgo, sí es afectada por la pesca furtiva, ya que la temporada de pesca permitida es del 1 de agosto al 15 de diciembre, para que en el resto de los meses las hembras puedan llegar a los sitios donde se reproducen y ponen sus huevecillos.

Diversas pesquerías han hecho la solicitud para que el pulpo maya obtenga por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) la denominación de origen, la cual contribuiría a que tenga mayor protección la especie, a nivel local, como federal.

Recordemos que los productos que tienen denominación de origen, cuentan con programas que tratan de darle la mejor calidad y si esta especia la llega a tener, estaríamos hablando de una pesca responsable.

En relación a su importancia ambiental, estudios hechos en la Unidad Académica de Sisal, unidad de extensión de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indican que el pulpo maya es un indicador del aumento de temperatura en el mar, como consecuencia del calentamiento global.

Es decir, el pulpo vive en temperaturas que oscilan entre los 22 y 26º C, pero si hay grados por encima o por debajo de este rango, las hembras no pueden poner sus huevos o definitivamente, las crías no nacen, además que los ejemplares adultos se estresan y no les es posible reproducirse. 

La especie se encuentra distribuida desde Isla del Carmen en Campeche hasta Isla Mujeres, Quintana Roo.