diciembre 18, 2024

México se une a Venezuela y Pakistán en el ‘club’ de países con categoría 2 en seguridad aérea

La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA ) otorga categoría 2 a países que no proporcionan supervisión de seguridad de sus operadores de transportistas aéreos.

 

Tras la degradación de la aviación mexicana a categoría 2 otorgada por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por su sigla en inglés), por no cumplir con los estándares de seguridad de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), México pasó a formar parte del ‘club’ de países con esta categoría.

En esta lista se encuentran Venezuela, Ghana, Pakistán, Tailandia, Malasia, Bangladesh, Curacao y los países que forman parte de la Organización de Estados del Caribe Oriental.

De acuerdo con la FAA en la categoría 1 se incluyen aquellos países que fueron supervisados y evaluados por inspectores de dicha administración y que en consecuencia determinaron otorgar licencias, así como supervisar a las compañías aéreas de acuerdo con los estándares de seguridad de la aviación de la OACI.

Mientras que en la categoría 2 se incluyen los países que una vez evaluados por la FAA se determinó que no proporcionan supervisión de seguridad de sus operadores de transportistas aéreos de acuerdo con los estándares mínimos de supervisión de seguridad establecidos por la OACI.

La calificación de categoría 2 se le otorga a un país en las siguientes situaciones:

*En caso de que el país carezca de las leyes o reglamentos necesarios para respaldar la certificación y supervisión de las compañías aéreas de acuerdo con las normas internacionales mínimas.

*Si la Administración Federal de Aviación carece de la experiencia técnica, los recursos y la organización para otorgar licencias o supervisar las operaciones de los transportistas aéreos y también si no cuenta con personal técnico capacitado y calificado.

*Si el país supervisado carece de documentación y registros de certificación, así como de una supervisión y vigilancia continuas en las operaciones de los transportistas aéreos.

Fuente: EL FINANCIERO