Funerarias de Yucatán, libres de establecer sus tarifas
Las tarifas varían dependiendo de la empresa y de las características de la velación
Los precios del servicio funerario están “liberados” en el Estado, por lo que cada empresa fija sus tarifas con base en lo que otorga y las solicitudes que los familiares realicen como parte del rito de velación, comentó el presidente de la Asociación de Funerarias de Yucatán, Alejandro Espadas Villajuana.
El precio de la cremación de un cadáver es de dos mil 38 pesos en el Cementerio Xoclán y de 10 mil a 18 mil pesos en el complejo privado La Piedad, de acuerdo con información de Espadas Villajuana, director general de las funerarias Poveda y La Piedad, y el regidor del Cabildo meridano Gabriel Mena Guillermo.
“Este virus (Covid-19) vino a aumentar el número de incineraciones a un 70 por ciento. Antes de la pandemia, las cifras eran del 40 por ciento. Respecto a las inhumaciones, ahora son el 30 por ciento, cifra que disminuyó porque oscilaba entre un 60 por ciento, es decir, la cremaciones aumentaron y los entierros disminuyeron a raíz del coronavirus”, explicó.
Espadas Villajuana informó que en Mérida las funerarias cuentan con 12 hornos crematorios, uno se encuentra en Xoclán, dos en el complejo funerario La Piedad y los demás en funerarias privadas. Los otros cuatros hornos se encuentran en empresas de Kanasín, Umán, Progreso y Tixkokob.
Precisó que en estos momentos de la pandemia los hornos crematorios de la entidad trabajan a un 70 por ciento de su capacidad y agregó que observa un sector funerario sólido y con una capacidad para realizar 88 cremaciones al día.
Debido al aumento en el número de contagios por coronavirus en el Estado, la demanda de servicios funerarios en los últimos días incrementó, ahora ofrecen alrededor de 15 servicios por día.
“En la capital del Estado no se verán cadáveres en las calles, como sucedió en otras ciudades; lo más podría pasar es que los cuerpos tengan que esperen dos o tres horas por un turno para ser incinerados”, indicó.
Explicó que la cremación de un cadáver dura alrededor de tres horas, pero existen equipos que ofrecen un menor tiempo. En su mayoría, los hornos trabajan con fuego que puede alcanzar los 900 grados, garantizando la esterilización de las cenizas y la muerte del virus, demostrado científicamente que no resiste a una temperatura de 70 grados.
El servicio funerario consiste en trasladar en carroza el cadáver desde el hospital o clínica donde ocurrió el deceso hasta el cementerio; la velación, si lo desea la familia; la incineración del cuerpo en un horno crematorio a 900 grados de temperatura, y la entrega de las cenizas esterilizadas por el fuego.
El director de estas funerarias dijo que el manejo de cadáveres con Covid-19 son de alto riesgo, por lo que el personal que maneja el cuerpo usa equipos de protección especial y reforzado como overol, cubrebocas, lentes, zapatos desechables, guantes, gel antibacterial y desinfectantes para esterilizar las carrozas, lo que eleva el costo para ellos como empresa.
Resaltó que las carrozas cuentan con una división en el interior que tiene por objetivo aislar por medio de cristal templado o acrílico al chofer y el cadáver, además ellos cubren con otra bolsa el cuerpo para brindar una mayor protección a sus empleados.
“Por la pandemia se elevaron mucho los precios de los equipos de protección personal. En un servicio se utilizan mínimo cinco trajes completos, gastamos más de tres mil pesos en ellos y hasta ahora hemos invertido más de 40 mil pesos solo en equipos de protección y desinfectantes”, expuso.
Fuente: Novedades Yucatán