FGE pedirá recursos a la nueva legislatura de Quintana Roo
Incrementar el personal en la Policía de Investigación y reducir el rezago en las carpetas de investigación, son los principales pendientes en la Décima Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, comentó el titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Óscar Montes de Oca Rosales.
Explicó que aunque se solicitó al Congreso del Estado aumentar el presupuesto para la dependencia, no se autorizó, por lo que se le pedirá de nuevo a la nueva legislatura, aunque no dio a conocer las cifras.
Respecto a los logros de la FGE, subrayó que cuando llegó en diciembre de 2018 encontró una institución completamente destruida, desorganizada y sin capacitación, pero que hoy están en mejores condiciones. Comentó que se va a colaborar con el gobierno municipal de la isla para capacitar al personal como peritos, para que puedan intervenir en los procesos penales de la FGE, situación que está considerada en la ley.
Sobre la posibilidad de designar un presupuesto para el mantenimiento de las instalaciones de la décima agencia del Ministerio Público del Fuero Común, pues en su interior y exterior se notan el paso del tiempo y el escaso mantenimiento, dijo que por el momento no hay presupuesto, pues el estado atraviesa por una situación financiera no favorable y hay otras prioridades.
Sobre un posible incremento en el número de integrantes de la Policía de Investigación para los próximos meses, que hoy es de ocho personas, dijo que es facultad del congreso estatal.
Montes de Oca hasta el 2027
En cuanto a la continuidad en su puesto, cuyo período concluye en 2027, dijo que las causas para dejar su cargo están establecidas en la Constitución de Quintana Roo. Aclaró que se ha reunido con representantes del próximo gobierno estatal y que mantiene una excelente relación.
Admitió que aunque se hicieron importantes esfuerzos, aún faltan muchas cosas por hacer, pero destacó que recibió la dependencia en ruinas, con ausencia de protocolos, modelos de actuación, de procedimientos, norma interna, retrasada en tecnología y hasta personal que se negaba a trabajar o que iban en contra de la política interna.