COVID-19 afectó el funcionamiento de los servicios de salud para enfermedades no transmisibles en las Américas.
Los servicios de prevención y tratamiento de las enfermedades no transmisibles (ENT) se han visto gravemente afectados desde el comienzo de la pandemia de COVID-19 en la región de las Américas, según una encuesta de la Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).
La encuesta virtual, que fue completada a nivel global por 158 países y a nivel regional por 28 Estados Miembros de la OPS durante un período de cuatro semanas en mayo, confirmó que el impacto es mundial y que la interrupción de los servicios de salud de rutina constituye una amenaza para la salud de las personas que viven con enfermedades crónicas.
Acceso limitado a los servicios:
Los servicios de salud ambulatorios se han visto parcialmente interrumpidos en 18 países encuestados (64%), dos los han interrumpido completamente y en siete países (25%) han permanecido abiertos. Estas interrupciones han afectado todo tipo de atención para personas con ENT, pero más aún para servicios de diabetes, hipertensión, cuidado dental y rehabilitación.
Las principales razones citadas para la interrupción de los servicios de ENT incluyen la cancelación de la atención electiva de servicios (58%, 14/24), el personal clínico que se reasigna a la respuesta de COVID (50%, 12/24), y pacientes que no se presentan (50%, 12/24).
Reasignación de personal.
En la mayoría (89%) de los países de las Américas que respondieron a la encuesta, el personal de los ministerios de salud que trabajaba en la esfera de las ENT fue parcial o totalmente reasignado para apoyar la respuesta a la COVID-19.
Estrategias alternativas para la continuidad de la atención.
Las conclusiones alentadoras del estudio fueron que en la mayoría de los países se han establecido estrategias alternativas destinadas a posibilitar que las personas más vulnerables sigan recibiendo tratamiento contra las ENT. Entre los países que notificaron interrupciones de los servicios, el 61% están utilizando actualmente la telemedicina, el 70% dijo haber recurrido al triaje para determinar las prioridades de atención, el 57% ha adoptado una dispensación novedosa de medicamentos para ENT y el 52% ha redirigido pacientes a lugares de atención alternativos.