Chiapas, el estado con mayor diversidad e intolerancia religiosa
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en los resultados del Censo de Población y Vivienda 2020, colocó a Chiapas como el estado con mayor diversidad ideológica del país, además, mantiene el menor porcentaje de población que se asume católica. Porcentaje de la población por grupo religioso en México, ordenados por religiones protestantes/cristianas evangélicas. Gráfica: INEGI
La diversidad ideológica en Chiapas se puede notar por la multiplicidad de religiones, pero es en la región Altos, en la que se puede apreciar con mayor precisión, ahí se pueden encontrar mezquitas, templos judíos, casas de oración y más.
Dicha diversidad, ha sido motivo de intervención gubernamental ya que desde hace años se ha manifestado intolerancia religiosa, en la que victimas han denunciado desplazamientos, amenazas e intimidaciones por profesar una ideología diferente al de su comunidad.
El INEGI, en su última actualización, informa que en México se mantiene un dominio de la religión católica ya que el 78% de su población se declara profesa, pero en la entidad del sur, el porcentaje disminuye hasta el 54%.
Chiapas con 32% es la entidad con mayor porcentaje de población que es protestante y/o cristiana evangélica, debajo se encuentran otros estados como Tabasco (27%), Campeche (24%), Quintana Roo (21%) o Tamaulipas (17%), la media nacional se encuentra en un (11%).
Y es quinta nacional con 13% de población que no se identifica con ninguna religión, solo por debajo de Chihuahua (14%), Campeche (14%), Baja California (19%) y Quintana Roo (22%).
Este mismo Censo, detalla que en Chiapas existe 5 millones 543 mil 828, al hacer la conversión proporcional, nos lleva a la siguiente aproximación, en la que existen casi 3 millones de católicos y casi 2 millones de protestantes y/o cristianos evangélicos.
Desde 2015, se han registrado desplazamientos, amenazas y hasta intimidación han sufrido grupos que profesan públicamente otra religión que la mayoritaria en su comunidad
atólica | Protestante / cristiana | Ninguna | Otras | Creyente sin adscripción |
2,993,667.12 | 1,774,024.96 | 776,135.92 | No especificado | No especificado |
Intolerancia religiosa
Mujeres tsotsiles practican la religión musulmana. Foto: Elizabeth Ruiz
En Chiapas Paralelo, se han escrito casos por intolerancia religiosa desde el 2015, en la que inclusive organizaciones religiosas han denunciado a presidentes municipales y las autoridades gubernamentales son omisas en garantizarles su libre expresión religiosa.
En abril de 2019, se informó que 11 indígenas tseltales evangélicos de la comunidad de Chiquinivalvó en Zinacantán, fueron llamados a una asamblea comunal, donde se supone se deben tocar de interés general, dicha reunión fue para establecer los puestos de organización de cara a la festividad católica de Santa Cruz.
La elección de estas autoridades, denominados mayordomos, es para encargarse de gestionar, administrar e inclusive contribuir económicamente para que se lleve a cabo esta fiesta. En dicho acto, la comunidad decidió que Juan Hernández Pérez, pastor evangélico, fuera el mayordomo, por obviedad, este se desistió del puesto.
La negación de Hernández Pérez trajo consigo de que fuera retenido por más de un día junto a 11 personas más. Cabe señalar, que la designación para la mayordomía se realiza bajo usos y costumbres, por tanto, según los señalamientos internaos a cada miembro de la comunidad debe tocarle de formar rotativa aportar en apoyar a realizar dicha festividad.
Un mes antes de este hecho, un grupo de familias evangélicas también fue retenida en la Ranchería Chihuahua, en el municipio de La Trinitaria, sin embargo, delegados de la Secretaría realizaron gestiones para su liberación y se firmó un acuerdo de respeto y paz.
Otro caso similar al de Chiquinivalvó, fue el de Yaxtinin comunidad de San Cristóbal de las Casas en 2012, cuando 11 familias fueron desplazadas por practicar una religión distinta a la de su comunidad. En ese entonces el gobierno de Juan Sabines Guerrero, atendió el caso de manera fortuita al ubicarlos en un albergue. En 2015, durante el gobierno de Manuel Velasco Coello, se realizó una firma para reubicarlos, dándoles un terreno, pero ya no era 11 sino que ascendieron a 32 familias ya que se dieron desplazamientos paulatinos durante esos 3 años, sin embargo, hasta ahora las familias indígenas viven en el desamparo.
Según López Herrera, quien ha llevado casos durante los últimos 12 años, indicó que tiene al menos 6 denuncias formales para pedir la reubicación y detención de responsables del desplazamiento por razones religiosas de 115 familias de 9 comunidades, un total de 700 personas entre ellos niños, niñas y adultos mayores, quien hasta ahora no pueden regresar a su hogar.
Otro caso fue la expulsión de indígenas evangélicos de una comunidad de Las Margaritas en enero de 2016.
Además, han existido protestas enérgicas, como la de octubre de 2015, en la que La Coordinación de Organizaciones Cristianas (Misión 21 Gramos, AC) denunció que desde el pasado 7 de enero de 2015, el ahora Expresidente Municipal Carlos Mayo Mendoza, firmó un compromiso institucional a nombre del Ayuntamiento de Palenque para indemnizar a cuatro familias afectadas por la Persecución Religiosa que se vive en el Ejido Cuauhtémoc Cárdenas de ese Municipio.
Otro caso, es el de autoridades del ejido Mariano Matamoros del municipio Venustiano Carranza, respaldadas por la mayoría de la población católica, cortaron la luz y el drenaje y además despojaron de dos predios a unas 30 familias evangélicas, conformadas por más de 120 personas.
La Coordinación de Organizaciones Cristianas (Misión 21 Gramos AC) denunció que las autoridades encabezadas por Humberto Zúñiga Bautista y Guadalupe García Moya se reunieron “para realizar cortes de agua y drenaje de las familias evangélicas de ese lugar, a quienes han afectado desde el 2012 por la única razón de profesar una religión diferente a la mayoría de los habitantes del ejido Mariano Matamoros”.
Por último, en enero de 2015, Evangélicos de la comunidad Las Ollas, ubicada en San Juan Chamula, denunciaron que el 8 de enero fueron golpeados por autoridades tradicionales, en represalia por negarse a cooperar con 250 pesos por familia, para la celebración de la Virgen de Guadalupe.
Manuel Collazo Gómez, líder de la Organización de Pueblos Evangélicos de los Altos de Chiapas (OPEACH), acusó de la agresión a un grupo encabezado por Manuel Méndez Gómez golpeó a los evangélicos que no cooperaron para las fiestas.