Yucatán: Congreso aprueba empréstito para transporte eléctrico Ie-tram

El Congreso del Estado de Yucatán aprobó esta mañana el presupuesto de financiamiento solicitado por el gobierno del estado, por mil 735 millones de pesos, para el proyecto Ie-tram.

El gobernador Mauricio Vila Dosal, en sus redes sociales, publicó: “agradezco al Congreso Yucatán el trabajo en equipo para transformar la movilidad en Yucatán, impulsando importantes proyectos como el Ie-tram, único en su tipo en toda Latinoamérica y la primera ruta en el sureste 100 por ciento eléctrica, que conectará Kanasín y Umán con Mérida y 137 colonias, un transporte digno y a la altura de lo que las y los yucatecos merecen, marcando el futuro de Yucatán”.

En el pleno, los diputados también aprobaron un crédito de hasta 350 millones de pesos para inversión pública productiva del ayuntamiento de Mérida, mismo que se pagará en un plazo de 15 años. Tras el aval, el primer edil del municipio, Renán Barrera Concha, también usó sus redes sociales para celebrar y agradecer al Poder Legislativo; explicó que con esta autorización ahora van a “renovar la infraestructura de movilidad urbana y espacios públicos de Mérida y responder a las necesidades de la ciudadanía así como al rezago derivado de dos años de pandemia”.

El diputado Eduardo Sobrino Sierra, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), resaltó que ambas solicitudes presentadas hoy estuvieron relacionadas con el Tren Maya: “coincidimos con que hay que apoyar; comunicar la estación del tren que se va a poner a las afueras de la ciudad (de Mérida) y comunicar de manera fluida a dos asentamientos ya bastante poblados como lo son Kanasín y Umán, se convierte en un tema de urgente necesidad”.

A pesar de manifestarse a favor de estas solicitudes hechas tanto por el ayuntamiento de Mérida como el gobierno de Yucatán, dejó claro que este posicionamiento no significa que les apoyarán en más peticiones de recursos, asimismo, exigió que este proyecto sea con transparencia y de beneficio para el Tren Maya.

MC, a favor

“Para decidir el sentido de mis votos en esta sesión, me reuní con grupos de la ciudadanía, con expertos financieros y con el equipo multidisciplinario que conforma la coordinación estatal y municipal de Movimiento Ciudadano en Yucatán”, expuso la diputada Vida Gómez Herrera, representante del partido naranja en el Poder Legislativo.

Fue así como, luego de foros, reconoció que Mérida y Yucatán tienen la necesidad de mejorar el sistema de transporte, seguridad vial y garantizar el derecho a la ciudad de las personas yucatecas.

“Este financiamiento debe ir acompañado de una vigilancia permanente con participación y conocimiento de la ciudadanía; las autoridades deben informar puntual y públicamente sobre los avances de la inversión, y estaremos muy atentos a que esto se cumpla”, señaló.

PAN, a favor

Desde Acción Nacional, partido solicitante, el diputado Jesús Pérez Ballote dijo que es esencial dotar a los municipios con los recursos necesarios para trabajar en favor de la calidad de vida de los ciudadanos. Señaló que la solicitud del ayuntamiento de Mérida “tendrá un destino cierto, mediante la inversión en infraestructura hidráulica, rehabilitación de vialidades, parques y mercados municipales, entre otros».

Morena, también a favor

El Movimiento Regeneración Nacional (Morena) también apoyó estas solicitudes. La diputada Alejandra Novelo Segura justificó que “finalmente hay un gobierno federal que voltea a ver a esta zona -históricamente abandonada- y que la integra como piedra angular de un gran proyecto nacional (Tren Maya) que busca generar beneficios concretos con obras y proyectos prioritarios que detonarán el desarrollo de esta península de Yucatán y de las condiciones de vida de sus habitantes”.

Considerando que ambas solicitudes en este día estuvieron relacionadas con dicho proyecto como obras complementarias para la optimización de la infraestructura por construir y el mejoramiento del entorno, “se debe fomentar la colaboración con las dependencias y entidades de los tres órdenes de gobierno para promover la colaboración y participación en este proyecto prioritario”.

La morenista aseguró que esto no fue un “cheque en blanco”, sino que un trabajo coordinado que representa voluntad política “para complementar las obras de infraestructura y los proyectos estratégicos que se están desarrollando en nuestro estado y en esta región del país”.

Fracción legislativa del PRI se opone

En esta ocasión, fue el Partido Revolucionario Institucional (PRI) el que manifestó su inconformidad. Respecto a la solicitud del ayuntamiento de Mérida, la fracción tricolor -en voz de la diputada Fabiola Loeza Novelo- expuso que “debe decirse que el costo real del crédito solicitado asciende a 684 millones de pesos, considerando los 334 millones de pesos correspondientes a intereses […] el ayuntamiento ha dado prioridad a gastos superfluos que no tienen un impacto directo en el mejoramiento de las condiciones de vida de los meridanos”.

La priísta señaló que la infraestructura debería ser financiada con ingresos propios y no con un nuevo endeudamiento, pues además “la información proporcionada por el Ayuntamiento en la solicitud de autorización para la contratación del financiamiento no se encuentra justificada, los elementos aportados no permiten tener claridad y certeza con relación a la viabilidad del proyecto que se pone a consideración, ni cuáles serán los beneficios directos que traerá a la población”.

Desde la misma bancada, el diputado Gaspar Quintal Parra expuso que con la solicitud del gobierno del estado para el transporte eléctrico “se genera el riesgo de iniciar un trámite de endeudamiento sin tener la certeza de que los recursos solicitados serán los suficientes o los necesarios para concluirlo de manera eficiente”.

Apuntó que “en ninguna de las partes del proyecto se hace referencia a las o la dependencia encargada de la ejecución de los trabajos, ni se menciona mediante qué instrumentos se administrarán los recursos de las tres fuentes de financiamiento (federal, estatal y privada)”, por lo cual consideran que antes de contraer la deuda, debería haber una metodología que evalúe las acciones y sus costos sobre los beneficios, pues tampoco plantean mecanismos que aseguren el uso eficiente, seguro y rentable del préstamo.

“Le apostamos a un desarrollo sostenible, que satisfaga las necesidades del presente sin comprometer las capacidades futuras. No debemos poner en riesgo a las generaciones futuras por un manejo irresponsable de los recursos presentes”, finalizó.